
Había una vez una payasa, llamada Audífona, que sólo podía oír aquellas cosas que se decían con el corazón. Por eso, aquel día, algunas personas que se dirigieron a ella pensaron que era sorda...
"En la calamidad, el payaso siempre encuentra una oportunidad"
(este cuento fue enviado por Jesús Jara junto a sus deseos de Feliz 2008)
No hay comentarios:
Publicar un comentario